La película sigue a una familia de vignerons en Toscana, que luchan por mantener su pequeña bodega a flote mientras navegan por desafíos emocionales y económicos. La historia se centra en el conflicto entre la matriarca de la familia, que quiere vender la bodega a un comprador extranjero, y su hijo, que lucha por mantener su legado y tradición. La película explora temas como la familia, la identidad, la tradición y el cambio, y cómo estos elementos influyen en las decisiones y acciones de los personajes.